He sido miembro de LifeWave durante más de 13 años y he visto y experimentado una gran cantidad de "milagros" gracias a esta tecnología. Pero este más reciente con el X39™ tiene que estar entre los más asombrosos de todos. Hace una semana, cerré sin darme cuenta la puerta trasera de mi auto con la punta del tercer dedo de mi mano derecha. Le tomó alrededor de 2 segundos para que comenzara a doler, pero luego se fue a las carreras - ¡¡owww!! Aproximadamente a los 10 segundos, me dolía mucho, comenzaba a ponerse azul y se oscurecía por segundos. Pensé en volver a las instalaciones que acababa de dejar y pedir un poco de hielo, pero realmente no quería hacer eso. En un capricho un tanto desesperado, saqué un parche X39™ y, con él todavía en la bolsa de plástico muy pequeña en la que guardo mis parches de 'emergencia', lo envolví suavemente alrededor del último tercio de este dedo, con muy pocas expectativas de que esto serviría de algo, pero viendo poco más que hacer. Durante aproximadamente 30 segundos, el dolor continuó aumentando (aunque probablemente más lentamente) y el color continuó oscureciéndose (aunque también más lentamente que antes de colocar el parche). Luego, estos cambios se detuvieron lentamente y, sin lugar a dudas, comenzaron a revertirse: el dolor comenzó a disminuir y el color, ahora azul oscuro con algo de negro en la mayor parte del último tercio de ese dedo, comenzó a aclararse lentamente. En otro par de minutos, el dolor se había reducido a insignificante y el color, excepto por una línea muy pequeña en un lado del dedo, ¡volvió a la normalidad! ¡Estaba francamente asombrado! Después de otro minuto más o menos, me quité el parche cómodamente y comencé a conducir a casa. Sin embargo, unos minutos más tarde, pude sentir que el dolor comenzaba a regresar, así que saqué el X39 de mi mochila y lo volví a colocar sobre ese dedo, dejándolo allí hasta que llegué a casa, unos 10 minutos más. Para entonces, el dolor había desaparecido por completo y el color ahora era completamente normal. Excepto por tener un poco de cuidado de no aplicar una fuerte presión sobre él durante un día más, no hice nada más por él, ¡y no me causó más dificultades en absoluto! El extremo de este dedo tiene exactamente 1/2" de grosor, y el espacio en la puerta trasera de mi auto es exactamente 1/4"; la puerta se había cerrado y trabado por completo, con la punta de mi dedo en ese espacio. Todavía estoy asombrado por este efecto. Ojalá hubiera tenido la presencia de ánimo para tomar algunas fotos de este 'milagro' en desarrollo. ¡Todavía apenas puedo creerlo!
-ROGER BYRD